No quizo esperar al equipo de rescate porque los minutos corrían y las posibilidades de vida se reducían.
Asique se calzó un traje de buzo y sin importarle la temperatura ni el color negro del agua, decidió sumergirse a nadar en busca de sus seres amados
En algunos lados dicen que nadó seis días, en otros dos, lo cierto es que luchó contra todo y con esperanza salió a buscar lo que había perdido: su esposa y su madre.
Saben qué? Arriesgó su vida por ellas y las encontró! Con vida! Y tan felíz estaba de haberlas rescatado que sigue nadando en busca de más sobrevivientes!
Qué le habrá dicho su esposa cuando lo vió? Cómo habrá sido ese re encuentro?
Estas historias, que ya ni aparecen en las noticias destacadas son las que mas me gustan, y me hacen pensar.
Cuánto amor desesperado! Se sobrepuso al shock, el caos, la tristeza y con un poquito de esperanza se lanzó a buscar a sus amadas...y lo consiguió!
Ese amor, y aún uno más mayor y sublime que este, es el que llevó a Dios a dar la vida de su hijo Jesús en rescate por cada uno de nosotros!
Y como estamos respondiendo a ese amor?
Qué cosas le decimos a Dios en cada encuentro que tenemos con ÉL?
Y ahora me pongo en el otro lado de la situación...y digo: Dios, me has rescatado! Gracias! Te debo mi vida! Déjame salir a rescatar a mí ahora! dame la oportunidad de hablar de tu amor a los que están cerca mío!
Hermosa historia!
Inspiradora!
La nota completa aquí:
http://www.clarin.com/mundo/heroes-Japon-buceador-encontrar-mujer_0_452954926.html
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